Cuando estás en un campo yermo con tu corazón en la mano chorreando pedazos y una flor angustiada en el sombrero…
Aunque te falte el aire.
Aunque los días se olviden de ti.
Aunque el amor te dé la espalda.
Aunque tus ojos duelan.
Aunque la mentira rodee tu alma.
Aunque los ciegos te miren con sorna.