Permite que el sol te bañe de luz, permite que tu luz bañe al mundo.
¿Te has fijado en los árboles de tu alrededor?
Ellos están ahí.
Permanecen y viven.
Viven hasta el día de su muerte.
Hasta ese día, viven.
No tienen que hacer nada más, o eso imaginamos.
Tú no tienes que hacer nada.
Tienes que estar.
Tienes que estar plantado en tu vida.
Tienes que vivir.
Nada más.